Combatiendo la celulitis con una buena alimentación
La celulitis es considerada
oponente de muchas mujeres. Las marcas se vuelven todavía más
indeseables con la cercanía del verano, cuando el cuerpo está más
expuesto en playas y piscinas. Los hurones en la piel pueden dañar
la autoestima femenina, mas, por fortuna, pueden evitarse o bien, por
lo menos, verse suavizados. El secreto para eso es simple:
seleccionar comestibles que combaten la celulitis.
Nuestra piel depende de
determinados nutrientes para sostenerse hidratada, firme, sana y con
apariencia más joven. Estas substancias se hallan en los allimentos
que obtenemos de la naturaleza. El alimento industrializada y llena
de grasas sobresaturadas generan el efecto opuesto: puede ocasionar
mala circulación sanguínea, procesos inflamatorios y falta de
nutrientes, lo que empeora mucho la apariencia de la piel.
Una dieta rica en vitaminas,
minerales y fibras revitalizan la piel y distancian esas
inflamaciones en forma de hurones.
Los alimentos que combaten la celulitis
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Aceite de oliva extravirgen
Si, por un lado, las grasas
sobresaturadas cooperan para la aparición de estas marcas, por otra,
la del tipo monoinsaturada, presente en el aceite de oliva, regula
inflamaciones y ayuda para el mantenimiento de la piel.
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Plátano
Las fibras presentes abudantemente
en la fruta más popular entre los brasileiros son responsables de
regular el intestino. ¿Qué tiene que ver esto con la celulitis?
Este proceso produce menos absorción y acumulación de grasas.
Además de esto, el potasio estimula el drenaje linfático.
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Frutas cítricas
Naranja, pomelo, acerola, limón,
entre otras muchas frutas ricas en vitamina C, asimismo están
aliadas contra la celulitis. Eso es pues ese nutriente es un poderoso
antioxidante y actúa contra los radicales libres, uno de los
responsables de la aparición de las marcas características de la
celulitis en la piel. Además de esto, la vitamina es esencial para
la producción de colágeno, proteína responsable de la solidez de
cutis.
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Jengibre
Es un condimento natural que,
aparte de ser un potente antinflamatorio, ayuda a metabolizar las
toxinas, lo que afecta de forma positiva a la baja acumulación de
grasas.
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Frutas rojas
No deje de consumir las berries
(arándanos, fresas, goji berry, entre otros muchos), que son ricas
en ácido elágico, substancia que evita el envejecimiento temprano
de las células. Asimismo concentran buenas cantidades de
antocianidina, flavonoide que tiene acción antiinflamatoria y
robustece los vasos sanguíneos.
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Semillas oleaginosas
Comestibles como las nueces, las
nueces de Pará, las nueces de anacardo y las almendras son fuentes
ricas en omega tres (grasa buena) y vitamina liposoluble E. Estos
nutrientes actúan en la circulación sanguínea y, en consecuencia,
benefician a la lucha contra las celulitis.
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Arroz integral
Aparte de ser fuente de fibras, el
arroz integral contiene cromo, mineral que actúa en el metabolismo
de los hidratos de carbono. Con eso, la absorción de toxinas se
reduce, lo que mejora los cuadros de celulitis.
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Aguacate
Otra fuente rica en grasa buena.
El ácido graxo Omega nueve asimismo ayuda en el control del
cortisol, la hormona que causa la acumulación de grasas.
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Zanahoria
El betacaroteno presente en la
zanahoria no es eficiente solo para conquistar una piel bronceada.
Asimismo tiene acción protectora, lo que la hace padecer menos con
inflamaciones.
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Agua
Es bastante difícil hallar alguna
función que el agua no ejercite. En el caso de la celulitis, lo que
ocurre es que la piel precisa sostenerse hidratada para tener salud y
buen aspecto. Conque no te rindas de tener una botella de agua junto
a ti todo el día. Consuma otros comestibles ricos en agua, como
sandía, pepino y melón.
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Salmón
Este y otros pescados grasos son
proteínas delgadas, esenciales para hacer la piel más tonificada.
Lo mismo sirve para el pollo y las castañas.
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Semillas de girasol
Esta semilla es rica en omega
seis, grasa responsable del mantenimiento de los vasos sanguíneos,
que mejora la circulación. Esta substancia asimismo está presente
en otros productos, como la soja y los aceites vegetales.
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